¿A quién se adora en el Cielo? Parte 1

Cuando se lee el libro de Apocalipsis, uno se puede hacer una imagen, al menos parcial, de la adoración que se da en el cielo. Se mencionan cuatro seres vivientes, 24 ancianos y millones de ángeles que constantemente están adorando en espíritu y en verdad. La revelación no nos da muchos detalles pero nos dice lo suficiente para que podamos imitar esa adoración acá en la tierra.

Veamos algunos detalles de esa adoración en el trono celestial. En el capítulo 4 de Apocalipsis y el versículo 8 nos dice que los cuatro seres vivientes "no cesaban día y noche de decir: Santo, santo, santo es el Señor Dios Todopoderoso." Tal parece que estos seres vivientes se emocionan día y noche contemplando la santidad del Dios Todopoderoso. Dice además en el versículo 9, que "siempre que los cuatro seres vivientes dan honra y gloria y acción de gracias al que está sentado en el trono...los 24 ancianos se postran delante del que está sentado en el trono, lo adoran y echan sus coronas delante del trono." Interesantemente, hasta este momento hay un gran énfasis en la adoración al que está sentado en el trono.

¿Quién es el que está sentado en el trono? En el libro de Segunda de Crónicas en el capítulo 18 y el versículo 18 el profeta Micaías dijo: "Oíd, pues, palabra de Jehová: Yo he visto a Jehová sentado en su trono, y todo el ejército del cielo estaba a su mano derecha y a su izquierda." Según este texto el que está sentado en el trono es Jehová, el Padre. Esto lo podemos notar también en Apocalipsis capítulo 5 y versículo 7, que dice: "Y Él vino (El Cordero), y tomó el libro de la mano derecha de Aquél que estaba sentado en el trono. O sea, el que está sentado en el trono es el Padre y el Cordero, Jesucristo, toma el libro de la mano derecha de su Padre.

Volviendo a los detalles de la adoración, en Apocalipsis 4 y el verso 11 nos dice que los 24 ancianos le dicen al que está sentado en el trono que "digno eres de recibir la gloria y la honra y el poder; porque tú creaste todas las cosas y por tu voluntad existen y fueron creadas." Estos seres vivientes y los 24 ancianos adoran noche y día al Padre porque ellos comprenden que todo lo que existe se debe al Él. Ellos saben que el Padre es el único Dios verdadero y que de Él proceden todas las cosas incluyendo a Jesucristo, quien según sus propias palabras dijo: “Yo salí del Padre”, Juan 16:27.

Como hemos visto hasta este punto, la adoración por parte de los 4 seres vivientes y de los 24 ancianos está dirigida exclusivamente al que está sentado en el trono; el Padre. Esa misma invitación se nos hace a cada uno de nosotros en el libro de Apocalipsis 14 y el versículo 7 que nos dice: "Temed a Dios y dadle gloria, porque la hora de su juicio ha llegado; y adorad a aquel que hizo el cielo y la tierra, el mar y las fuentes de las aguas." Esta es la misma razón, según Apocalipsis capítulo 4 y versículo 11, que usan estos seres celestiales para adorar al Padre.

¿Significa esto que el único ser que debe recibir adoración es el Padre y nadie más? ¿No debe su Hijo acaso también ser adorado? En nuestra próxima reflexión veremos que Jesucristo también es y será adorado junto con su Padre, por toda la eternidad. Que el único Dios verdadero y su Hijo Jesucristo te den la sabiduría necesaria para comprender estas cosas maravillosas. ¡Amén!